Billie Eilish

Ciudadana del pop y del siglo XXI: Billie Eilish es la artista que necesitaba su generación

Con su más reciente videoclip «No time to die», sus tres premios en la gala de los Billboard y un documental a la vista, la joven artista se consolidó en el 2020 y siguió abarcando nuevos ámbitos de la música con tan solo 18 años.

No hay lanzamiento de Billie Eilish que actualmente no tenga un impacto relevante para la industria de la música. A pesar de la incertidumbre que deja la pandemia en el mundo, en el ámbito musical este es sin duda el año de la cantante estadounidense, quien desde hace 10 meses se consolida como representante del pop y de toda una generación.

Luego de que en enero hiciera historia en los premios Grammy, al ser la primera mujer que se lleva los cuatro trofeos principales de la noche por su álbum When We All Fall Asleep, Where Do We Go? (2019), la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas no quiso mantenerse ajena a ese contexto. Por ello, un mes después la invitaron a interpretar «Yesterday» –original de The Beatles– en la ceremonia de los premios Oscar. Para cerrar aquel ciclo de premiaciones, actuó en la gala de los BRIT Awards junto a una orquesta sinfónica y nos regaló «No time to die» por primera vez en vivo.

En marzo, cuando la pandemia ya era un problema mundial, brindó uno de sus últimos conciertos donde transmitió un video en el que se quitó la ropa. Sutil respuesta para quienes criticaban su figura y forma de vestir. Después de eso, el mundo se detuvo; pero no su mente. El confinamiento la llevó a un estado reflexivo del cual salió con uno de los mejores temas en lo que va del año: «My future». Junto a Finneas, su hermano y brazo derecho en la composición y producción, Billie nos entregaba en la letra el mensaje que todos necesitábamos ante la amenaza del COVID-19: «Porque yo, yo estoy enamorada de mi futuro. No puedo esperar a encontrarlo».

Su futuro, nuestro futuro

Su espíritu ciudadano también tuvo eco entre sus seguidores cuando –en mayo pasado– levantó la voz en favor del movimiento Black Matters, que surgió por la muerte del afroestadounidense George Floyd a manos de la policía de Minnesota (EE.UU).

Billie tampoco escapó de la política y a las próximas elecciones en su país: su primera interpretación en vivo de «My future» se dio en la Convención del Partido Demócrata de Estados Unidos, donde aprovechó para invitar a sus compatriotas a que voten en noviembre. Incluso, en su web oficial creó una nueva sección llamada ‘Vota’, la cual contiene un mensaje de la artista:

«Esta elección es la más importante de nuestra vida hasta ahora. Nunca ha sido tan importante votar. Hay muchos grupos que están haciendo un gran trabajo para que la gente se registre. Elige uno a continuación que te hable, luego registrate para votar y síguelos a todas partes. Mantente comprometido y vayamos todos a las urnas», explicó.

Sobre el candidato del Partido Republicano y actual presidente estadounidense, Donald Trump, no tuvo reparos en señalar que «está destruyendo Estados Unidos».

Con licencia para crear

Con la ayuda del director Daniel Kleinman, la cantante se detuvo un momento para terminar con el trabajo que inició a principios de año: el videoclip de «No time to die». Un material que en tan solo cuatro días en YouTube sobrepasó las diez millones de reproducciones; esto sucedió mientras se anunciaba que el estreno de la película protagonizada por Daniel Craig sería postergado hasta abril del 2021. Así, la estadounidense se convirtió en la artista más joven en formar parte del soundtrack principal en la saga de James Bond.

Pero este no es el único vínculo de la intérprete con el cine. En febrero del 2021 se presentará el documental Billie Eilish: The World’s a Little Blurry, a través de Apple TV+. La cinta, dirigida por R.J. Cutler y respaldada por la discográfica Interscope Records, contará aspectos de su vida personal y de su corta aunque exitosa carrera musical. Porque, a pesar de todo el recorrido mediático, debemos recordar que ella apenas ha cumplido los 18 años de edad.

En su juventud parece estar la clave de tal crecimiento artístico, además de en esa gratitud por quienes la inspiraron: las artistas mujeres que la precedieron. En la última gala de los Billboard Music Awards 2020, donde estuvo nominada en once categorías y finalmente ganó los premios Top Artista Femenina, Mejor Artista Nuevo y Top Álbum Billboard 200, la cantante dedicó sus logros a «quienes estuvieron antes de mí y que marcaron mi camino. Las quiero«.

Hacia el presente

Pero este es solo el comienzo para Billie Eilish. Su sonido ha cambiado constantemente desde el EP con el que apareció en el 2017, Don’t Smile At Me, hasta el lanzamiento de su álbum debut; y también varió su mensaje: pasó de letras desconcertantes (en versos como «enterrar a un amigo, quiero acabar conmigo» en «Bury a friend») a enamorarse de un futuro incierto aunque remediable en «My future».

Su inquietud creativa incluso trasciende los escenarios, pues luego de asociarse con la marca Fender y sacar su propio ukelele, también se atrevió con el deporte. Recientemente, Casey Wasserman, presidente del Comité Olímpico Organizador de los JJ.OO., lanzó una convocatoria para el diseño de un nuevo logotipo de cara al certamen del 2028, en Los Ángeles. Una de las artistas invitadas para que envíen sus propuestas fue Billie.

Estos diseños diseño representan la diversidad, la inclusión, la autoexpresión y la creatividad. Otras celebridades que participaron de la convocatoria fueron el medallista paralímpico Oz Sánchez, la futbolista Alex Morgan, la esgrimista Ibtihaj Muhammad, la actriz Reese Witherspoon y la activista Rachel Sumekh.

“¿Y quién sabe si eso va a ser relevante en mi vida dentro de ocho años?», se preguntó Billie Eilish en un mensaje dirigido a sus seguidores a raíz de su participación. ¿Podría ser elegida como el acto principal en Los Ángeles 2028? Nadie lo sabe aún, y probablemente a ella ni le preocupa. Porque si algo ha demostrado esta joven estrella del pop, es que no necesita complacer ni a su pasado ni a su futuro; ella apuesta por su presente. Y lo seguirá haciendo.