K Lil nos interna en su mundo frenético en el videoclip de «Programada para matar»

K Lil
Agustin Sanch

El productor argentino estrena una pieza audiovisual plagada de referencias de la cultura popular, la cual ha sido dirigida por Agustín Sánchez. Su sonido, aunque difícil de etiquetar, se nutre del trap y el hip hop.

En solo 2 minutos y 15 segundos, K Lil nos introduce a su mundo. Uno frenético, explosivo, multicolor y plagado de información; digamos, como el que nos rodea día a día. Eso es lo que muestra –en formato audiovisual– en el videoclip de su reciente sencillo «Programada para matar».

Este collage de la cultura pop y del «consumo maratónica de información en la era de YouTube», como bien ha descrito el multiinstrumentista y productor argentino, ha sido dirigido por Agustín Sánchez. «Entre Los Simpsons, Ratzinger, los Beatles y el cannabis, K Lil se transforma en un ser digital que conecta data de diferentes momentos y lugares del mundo», explicaron en un comunicado.

«El video refleja fielmente el contenido de K Lil: un rompecabezas de data e influencias anacrónicas que se reciclan y evolucionan en nuevas canciones que no se detienen en géneros o etiquetas», agregaron. En efecto, es difícil establecer los rumbos sonoros de este proyecto, aunque claramente se identifican aportes desde la electrónica, el trap y el hip hop.

Puedes ver el videoclip aquí:

https://youtu.be/PmaoTE9HuKI

A pesar de la pandemia, este ha sido un año bastante productivo para el músico. «Programada para matar» es uno de los seis sencillo que ha lanzado en el 2020, junto a los temas «Estuve muerto», «Mariposas», «Ella viene conmigo», «Mentira» y «Aquellas almas». Nada mal para este hijo predilecto de la Internet.

Sobre K Lil

K Lil toma su nombre del poeta y pintor libanés Khalil Gibran. Se destaca por tocar el sitar y fusionar ritmos hindúes con bases de trap, armonías beatle, guitarras high gain y autotune al límite. Se considera un artista multi-género, un hijo de la interconexión que desde su home studio de Floresta (Buenos Aires) compone, produce y edita toda su música.

Sus letras están atravesadas por temáticas cuasi religiosas que por momentos rozan sentimientos como la nostalgia y el cinismo. Define a Bach, los Beatles, Kanye West y Julian Casablancas como padres de su universo musical.