El cantautor peruano presenta el segundo adelanto del EP que planea lanzar en 2024. Fue producido por Rodrigo Malnati
Que te dejen en visto en Whatsapp. Que te ‘ghosteen’ (es decir, que te ignoren en las redes). O que no le den ‘me gusta’ a tus fotos y publicaciones. Las penas de amor digitales son numerosas y tienen diferentes causas, por lo que el músico Cututo ha intentado canalizarlas y convertirlas en canción con su más reciente sencillo «El fantasma». Un bolero con todas sus letras, pero reinterpretado con el sonido actual.
Esta es la fórmula que el cantautor peruano aplicó en su primer sencillo, «Que nadie sepa que te quiero», donde dejó en claro que busca combinar los estilos modernos con la música latinoamericana de otras décadas. Pero no es una sinergia meramente musical, sino que también es visible en la propuesta gráfica (la portada de «El fantasma» luce la típica iconografía de los chats), lírica y artística en general.
Este nuevo single de Cututo, que fue producido por Rodrigo Malnati, es el segundo adelanto del EP que planea lanzar en 2024. Gran letra, mejor sonido. Escúchalo a continuación:
Letra de «El fantasma» por Cututo:
Mi corazón se lanzó al mar
Flotó y zarpó en noches sin calma
Pero, de pronto, se quedó absorto
De ver tan bella madrugada
Me sorprendió tan linda alma
Y al fin sentir que encajaba
En su mirada, me enamoraba
Y comencé a soñar y ensamblar
Un corazón me permitió
Sentir el calor de su abrigo
Y de veras te digo
No me sentí así en siglos
Jugué a darle cariño, le di mis suspiros
Y el jugo a matar
Ay, y de pronto él dejó de contestar
Y no supe qué fue lo que hice mal
La tristeza me abrazó y me susurró
Al oído, como siempre, gané yo
Y de pronto me besó la soledad
Y mi alma hizo lluvia torrencial
Y me hundí en aguas turbias de dolor
Como esta canción
Y así su adiós nunca llegó
Se esfumó como humo del silencio
Ni un mensaje ni un texto
Ni un adiós, ni un lo siento
Jugué a darle cariño, le di mis suspiros
Y el jugo a matar
Ay, y de pronto él dejó de contestar
Y no supe qué fue lo que hice mal
La tristeza me abrazó y me susurró
Al oído, como siempre, gané yo
Y de pronto me besó la soledad
Y mi alma hizo lluvia torrencial
Y me hundí en aguas turbias de dolor
Como esta canción