Este es el primer tema autogestionado de la cantante nacional y el primero desde que inició la cuarentena.
Nuria Saba acaba de volver a su casa tras realizar un delivery a doce direcciones. Consiguió unos marcos para entregar de manera personal —respetando todas las medidas de seguridad y distanciamiento— el arte de su nuevo sencillo, «Maravillosos», a todos los que lo ordenaron previamente a su estreno el pasado 7 de agosto.
Para ella los detalles son importantes, por eso ha hecho de las cartas, dedicatorias y dibujos a mano, un hábito. «Es hermoso darte el tiempo de hacer las cosas así, con mucho corazón en ellas. Antes quizá andaba más corriendo de aquí para allá, y no podía darme el tiempo de sentarme ha hacer algo así de íntimo», cuenta en una entrevista para Tercer Parlante.
A pesar de siempre componer su material, este tema, trabajado durante la cuarentena, la llevó a conocer el mundo del márketing detrás de un sencillo. «Hice la canción justo atravesando una lucha personal. Había estado mucho tiempo con un equipo muy grande y me quedé sola. Tuve que aprender a manejarme en el mundo de la música, más allá de hacer una canción», explica Saba.
«Decidí optar por no depender de nadie nunca más, produje el tema con una gran amiga y música, Gisella Giurfa —baterista en Kanaku Y El Tigre—, el arte de la canción lo hizo mi mejor amiga de la universidad y gran parte del merch lo hice yo a mano. Es una etapa donde estoy descubriendo el trabajo duro, pero la felicidad de ser mi propio motor», agrega.
Tras iniciar el año con «Sueño en la altura», su colaboración con Achkirik, Nuria Saba decidió conocer el «suelo de un artista y meterse al barro». Con «Maravillosos» no solo refleja su lucha y la de muchos músicos en la autogestión, es también la prueba de que fue posible vencer barreras como sus propias inseguridades.
«Antes pensaba que si no me metía (en estos temas), menos posibilidades había que fracasara. Nunca he sido tan valiente como con esta canción», confiesa antes de programar los deliverys de mañana. Por el momento, sigue pintando.